¿Sabes cuál es el aceite que más le conviene a tu coche? ¡Toma nota!

La elección del mejor aceite para el coche depende de varios factores como las especificaciones del fabricante, la viscosidad, las especificaciones de calidad y si el aceite es mineral o sintético.

LO QUE DEBES SABER…
  • Buscar aceite: Elegir a partir del recomendado por el fabricante del coche.
  • Especificaciones: Es muy importante que sea igual o mejor que el recomendado.
  • Sintético: El sintético protege mejor el motor y durante más tiempo.
  • Viscosidad: Se puede elegir un aceite que tenga buena viscosidad en frío.

En el cambio de aceite para el coche surge la cuestión de saber cuál puede ser el mejor aceite. Hay muchas variables que diferencian a los diferentes aceites, pero las que importan para elegir el tipo de aceite son tres: las especificaciones; la clase, que puede ser mineral o sintética, y la viscosidad.

 

Especificación API o ACEA

 

Es muy importante que las especificaciones del aceite sean iguales a las que recomienda el fabricante en el libro de mantenimiento o mejores. Las especificaciones se reflejan siguiendo la clasificación API (American Petroleum Institute), la clasificación ACEA (Asociación de Constructores Europeos de Automóviles) o las dos. En la clasificación API se distingue entre gasolina con una S y diésel con una C, y la segunda letra, que va desde la A hacia delante, indica la calidad de menos a más. En la ACEA, se utiliza la letra A para gasolina y la B para los diesel, seguidas de un número que cuanto más alto sea indica mayor calidad.

Como ejemplos: si el libro de mantenimiento indica API SH, se puede subir a un SJ, y si indica ACEA B3, se puede subir a B4.

 

 

Aceite mineral o sintético

 

En cuanto a las clases de aceite, se dividen en dos grandes grupos, los aceites minerales, con base refinada del petróleo, y los aceites sintéticos, que tienen un tratamiento especial para mejorar la protección del motor y mantener estables sus propiedades más tiempo. Existe un tercer tipo que mezcla bases de aceites minerales y sintéticos que tienen características intermedias. La recomendación básica es utilizar siembre aceite sintético, ya que protege más, por una diferencia de unos 25 euros por cambio de aceite.

 

En principio, el aceite es mejor que sea sintético, de especificaciones del fabricante y con viscosidad baja en frío.

 

Qué es la viscosidad

 

Por último, está la viscosidad, que mide la capacidad de las moléculas para fluir y para resistir los cambios de temperatura. Para que un aceite cumpla bien su función debe ser fluido a bajas temperaturas para adherirse a las superficies metálicas cuando el motor está frío, desde el mismo momento del arranque, y al mismo tiempo conservar una viscosidad suficiente cuando se calienta para no escurrir con facilidad. En las latas hay dos cifras que indican la viscosidad. La primera hace referencia a una medición en frío (a –18°C), y la segunda en caliente (a 100° C). Si tu coche indica en el libro de mantenimiento un aceite 20-40, por ejemplo, rebajando la primera cifra y utilizando un 10-40, un 5-40 o incluso un 0-40, tendrás un aceite que llegará mejor a todos los rincones del motor al arrancar en frío, lo que incluso puede mejorar el consumo. Cuidado, porque no es recomendable subir esa primera cifra, por ejemplo a 30-40, porque el aceite podría no fluir lo suficientemente rápido en frío.

 

La segunda cifra expresa la viscosidad en caliente y no conviene subirla respecto a lo que aconseja el fabricante. Se puede reducir, pero no mucho, porque si pasas a una viscosidad muy baja el aceite sería demasiado fluido en caliente, lo que podría causar problemas cuando se acelera a fondo y se le exige la máxima potencia al motor.

 

Casos especiales

 

Hay algunas marcas que fabrican sus modelos para funcionar con un aceite con especificaciones muy concretas y hay que respetar esa recomendación para asegurar la vida del motor. El caso más conocido es el del Grupo Volkswagen y el motor 1.9 TDI. Este motor turbodiésel de inyector bomba requiere un aceite con la especificación 505.01 y no se debe utilizar otro para asegurar el funcionamiento de los inyectores. Las marcas que producen aceite con esta especificación indican claramente en la lata para TDI del Grupo Volkswagen. Este motor ya no se fabrica pero sigue funcionando en cientos de miles de coches de Volkswagen, Seat, Skoda, Audi e incluso en el Mitsubishi Grandis.

 

Aunque ya no se fabrican, hay muchos coches en funcionamiento con el motor 1.9 TDI de Volkswagen.

 

Aceite para coches con filtro de partículas

 

Para aquellos vehículos turbodiésel con filtro de partículas en el escape, de última generación, se empiezan a crear aceites especiales. El aceite para vehículos con filtro de partículas está creado de forma que produce menos cenizas y residuos, con lo que el filtro está más limpio y se reducen los problemas que genera la acumulación excesiva de carbonilla. Si tu coche tiene filtro de partículas puede interesarte usar este tipo de aceite, aunque primero aconsejamos preguntar en el Servicio Oficial.

 

Ya hay aceites específicos para coches con filtro de partículas en el escape.

 

Aceite “Long life”

 

Por último, algunos modelos de marcas premium como BMW, Mercedes o algunos modelos del Grupo Volkswagen, por ejemplo, están preparados para usar un aceite especialmente creado para durar más tiempo, comúnmente llamado “Long life”. Al usar este aceite los intervalos de mantenimiento se alargan y es el propio coche el que está preparado para avisar cuándo hay que hacer el cambio de aceite con un aviso en el cuadro de instrumentación. Para saber si tu coche acepta este tipo de aceite consulta el manual del vehículo o al Servicio Oficial. Vía motor.mapfre.es

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