Ya son 132 los fallecidos por los atentados de París. Estos son los nuevos datos que llegan desde la capital francesa, que vive aterrorizada desde el pasado el viernes. 42 de los heridos están en reanimación por lo que el número de víctimas es probable que aumente. Por otro lado, Alberto Pardo, a los que todos daban por fallecido, sigue vivo. Así lo expresaban tanto él, bromeando través de Facebook, como su madre. El Gobierno comunicó por error a sus padres la muerte de su hijo. También se ha desmentido la muerte del otro español, Jorge Alonso de Celada. De los heridos, 80 están en estado muy grave y los otros 117 están heridos leves o moderados y los ciudadanos ya se están movilizando en los diferentes hospitales para hacer donaciones de sangre.
Los ataques, que ya han sido reivindicados por el grupo terrorista Estado Islámico a través de un vídeo, están marcando la actualidad internacional y movilizando al mundo entero en repulsa de lo ocurrido. Y el primer ministro francés ya ha anunciado, en comparecencia, el desplegamiento de 1.500 militares en la ciudad y patrullas de control por el centro de París. Al tiempo que ha hecho un llamamiento al fiscal público, François Molins, para que prevalezca la transparencia en su investigación sobre los ataques. Las investigaciones no cesan y, según citan los diarios galos, uno de los terroristas, identificado por las Fuerzas de Seguridad, es un hombre de 30 años de nacionalidad francesa que ya estaba fichado por la Policía. Además, avanzan que los investigadores tienen registradas las conversaciones que tuvieron lugar en la sala Bataclan durante la masacre y que los autores hablaban francés, y que los terroristas pertenecían a tres bandas organizadas.
Así sucedió
Sobre las nueve de la noche París se sumió en el horror. Se sucedieron tres explosiones cerca del Stade de France y varios tiroteos en un bar de la ciudad parisina y en una sala de espectáculos llamada Bataclan. Un hombre armado con un Kalashnikov disparó contra los clientes de un restaurante de la capital francesa. Antes de comenzar a disparar, testigos en la zona pudieron escuchar como gritaba ‘Alá es grande’. En concreto, los tiroteos se produjeron en las terrazas de los bares Le Carillon y Petite Cambogde situados en el distrito X de París, junto al canal Saint Martin. En el Estadio se encontraba el presidente francés, François Hollande, presenciando el partido Francia-Alemania. Tras las explosiones, fue evacuado inmediatamente.
La información llegaba con rapidez a través de las redes y los medios de comunicación. Los propios medios franceses daban el primer balance de víctimas y heridos y anunciaban la muerte de ocho terroristas. Cuatro fallecieron en el asalto de la sala Bataclán, tres murieron al hacer saltar los cinturones de explosivos que llevaban y otro fue abatido antes de hacer estallar el artefacto.
Eran momentos de conmoción y confusión y, aunque no se había reclamado el atentado, según el periodista Mark Urban, seguidores de Estado Islámico estaban utilizando el hashtag en redes sociales ‘París en llamas»,
Tras los atentados, Hollande compareció, de inmediato, ante la nación en una intervención televisada desde el Palacio del Elíseo y anunció que decretaba el estado de emergencia en el conjunto del país, controles fronterizos y la movilización de militares para reforzar a la policía y a la gendarmería
Hollande pidió que todas las fuerzas se movilizaran para evitar más ataques. Además, avisó de que se iban a cerrar las fronteras de la capital y de que empezarían las investigaciones. No obstante, el presidente aseguró saber quiénes eran los autores de los atentados.»Venceremos al terrorismo» ese es el mensaje de tranquilidad que lanzó a la sociedad gala. acompañado de un «Vive la Republique et Vive la France». Posteriormente, junto con el Primer Ministro y el Ministro del Interior acercaron hasta la sala Bataclan.
Las primeras medidas de seguridad fueron el cierre de todas sus fronteras. El aeropuerto de Orly canceló todos sus vuelos. El aeropuerto Charles de Gaulle recibió algún vuelo procedente de EEUU pero cerraró su tráfico aéreo. Las instituciones francesas aconsejaron a toda la población que permanecieran en sus casas y no salieran a la calle. Además, se ordenó el cierre provisional de las salas de espectáculo en la Región de Île de France.
Las reacciones internacionales no se hicieron esperar. Según fuentes de Moncloa, el presidente español, Mariano Rajoy, se puso, de inmediato, en contacto con su homólogo francés para mostrarle su apoyo y a través de Twitter con el mensaje siguiente: «Conmocionado por las noticias que nos llegan de París. Francia tiene a su lado al pueblo español en estos momentos tan difíciles. MR». También el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, salió públicamente a mostrar su apoyo al presidente de Francia. «Esto no es solo un ataque a Francia, es un ataque a toda la humanidad» dijo.
El mundo de la música también muestra su solidaridad y U2, Foo Fighters y Eagles of Death Metal cancela los conciertos de sus giras en Europa. Precisamente, Foo Fighters tocaban el próximo 19 de noviembre en Barcelona.