El candidato del PP a la relección a la Presidencia de la Generalitat, Alberto Fabra, ha rehusado desvelar este jueves si permanecerá en la oposición si pierde las elecciones porque se ha mostrado convencido de que van a tener «una mayoría suficiente» para poder gobernar ellos «solos con acuerdos puntuales» y al respecto ha asegurado que no le supone «ningún problema».
Fabra, en una entrevista a la cadena Ser recogida por Europa Press, ha señalado, preguntado por si gobernará con Ciudadanos, que es una persona que «busca los consensos y lo que el sentido común dicte para hacer bien las cosas» y por ello ha destacado que con estas premisas es «fácil llegar acuerdos y estoy convencido de que lo haremos».
Con todo, no ha querido avanzar si permanecerá en la oposición si pierde las elecciones porque, ha argumentado, «hasta que no voten los ciudadanos no lo sabemos». «Pero yo estoy convencido de que voy a Gobernar, no soy personas de hipótesis, me gustan las realidades», ha señalado.
Preguntado por si el presidente del Gobierno y del PP; Mariano Rajoy, vería afectado su liderazgo si los populares sólo conservan Castilla León, ha argumentado que las mayorías absolutas en estos momentos son «muy complicadas».
«Estamos en un nuevo tiempo y debemos asumirlo todos, tenemos que buscar consensos y acuerdos puntuales, lo que nos debe hacer trabajar para tener gobierno estables y conseguir consolidar lo logrado», ha apuntado. Y ha añadido: «Yo no quiero hablar del día de mañana, yo estoy trabajando para conseguir aquí el mejor resultado en la Comunitat Valenciana y el día 25 hablaremos de muchas cosas».
Fabra, inquerido por si asume la herencia del anterior Gobierno de Francisco Camps, ha señalado: «yo soy muy prudente y trabajo cada día para resolver la situación». «Yo no miro para atrás, hay que mirra al futuro», ha apuntado.
Así, ha comentado, inquirido por si está preocupado por el empleo precario, que lo que le preocupa es «el paro». Al respecto, ha recalcado que su promesa de crear 400.000 puestos de trabajo en los cuatro próximos años, los 100.000 primeros antes de que acabe el año 2015, «no es una promesa electoral, sino una seguridad que vamos a conseguir».