‘Noventa minuti en Mestalla son molto longos’

Es difícil definir en una palabra el torrente de emociones que embargó a gran parte de los aficionados tras el pitido final. Mirar en dirección al árbitro fue casi instintivo, después del enésimo atraco en territorio hispalense. Que tradicionalmente el Bernabéu haya sido el escenario de las golfadas arbitrales más célebres no significa que los perjuicios no tengan lugar a menudo en plazas menos mediáticas. El esloveno Skomina, desde ayer, se une a la lista de la infamia junto a trencillas como Clos Gómez, Florian Meyer, Tony Chapron, Tristante Oliva y compañía. Lo mejor de cada casa.