Gleeson acaba de regresar recientemente de un viaje a Haiti con la ONG solidaria Goal, de la que destacó las «ganas de sobrevivir y superar» el terremoto que acabó con la vida de 230.000 personas en 2010. El actor confesó que pretende dejar a un lado la actuación cuando termine su rol encargando al cruel rey en la ficción creada por George R.R. Martin. «Actuar siempre fue un divertimento para mí, pero cuando comencé a participar en ‘Juego de Tronos’ la realidad se volvió demasiado tangible», explicó.
El actor británico de 21 años agregó que «el estilo de vida que conlleva ser actor en una serie de éxito no es algo hacia lo que tenga predilección», y que nunca ha visto ninguno de los episodios en los que encarna al terrorífico personaje: «No suelo hacerlo, es raro cuando veo alguno de los clips en los que aparezco. Sueles abstraerte del pavor que provoca el personaje cuando lo encarnas, pero cuando lo ves por televisión te da escalofríos».
«Supongo que trataría de defenderle», añadió, «pero me costaría bastante hacerlo. Supongo que Joffrey es producto del contexto en que se crió y de su familia. Si hablamos de cualidades destacables, no hay demasiadas».
Gleeson, quien tenía 17 años cuando fue escogido para el papel tras varias pruebas, explicó que lleva una vida más o menos normal en Trinity (Londres), donde actualmente estudia Filosofía y Teología. «Recientemente he reevaluado lo que quiero hacer en mi vida. Tengo 21 años, así que es difícil decir el camino por el que me llevará la vida», sentenció.