Después del partido en Villarreal, al Valencia Mestalla tan sólo le restarán cinco encuentros para finalizar el campeonato en Segunda División B, pero a día de hoy nadie puede asegurar que vaya a ser con Nico Estévez sentado en su banquillo.
Tras la derrota contra el Getafe en Mestalla el presidente Amadeo Salvo realizó una visita a las instalaciones de la Academia Gloval para charlar con Rufete. Allí, le transmitió el estado del proceso de venta del club -un día antes de conocer las siete ofertas existentes para hacerse con la mayoría accionarial- y sobre todo quiso responder a las inquietudes que poseen los empleados ante un futuro incierto con un nuevo propietario.
El Valencia Mestalla que todavía dirige un cada vez más debilitado en el cargo Nico Estévez vuelve a los terrenos de juego para medirse al Villarreal ‘B’, otro filial en crisis de resultados y un rival con el que tratar de salir de la grave situación que tiene a los valencianos a tres puntos del descenso.
Cambiar la forma de trabajar de una cantera es un proceso largo. Este tipo de proyectos comienzan a prosperar al cabo de los cinco años. En el caso del Levante, la escuela granota comenzó recientemente a dar sus frutos. Con una inversión que ronda los 300.000 euros, la entidad de Orriols ha conseguido situarse a la altura de los mejores equipos españoles e internacionales.
El valencianismo ya tiene motivos para celebrar, sólo tiene que mirar un poco más abajo del primer equipo y el filial, decepcionantes hasta la fecha, y centrarse en el espectacular Juvenil A que entrena Rubén ‘Pipo’ Baraja. Este miércoles, estas jóvenes perlas blanquinegras sellaron el título de Liga con un empate frente al Villarreal, recuperando la hegemonía en el grupo de División de Honor por delante del Levante, el vecino de la ciudad.
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El entrenador del Valencia Mestalla analizó a la conclusión del empate contra el Elche Ilicitano un encuentro que no resolvió los problemas que acumula el filial valencianista. «No estamos teniendo la fortuna de cara en cuanto a hacer ese gol que nos de la victoria. Lo más importante era ser competitivos contra un rival que nos superó muy claramente en la segunda parte del partido de ida», remarcó el joven técnico valenciano.
Empate a cero entre los dos filiales, lo que deja a los valencianistas con tres puntos de ventaja sobre el descenso directo a falta del partido que el Levante B disputará mañana domingo, y a un sólo punto de la salvación. Pero el que más celebra el punto cosechado fuera de casa es un Elche Ilicitano que sigue en la pelea por ascender, pese a que hoy estuvo maniatado en casi todo momento por el Valencia Mestalla.
No es momento de venirse abajo. Nunca lo ha sido y nunca lo será. Es momento de reflexionar, darse cuenta de que uno forma parte de uno de los mejores clubes de España y Europa y hacer honor a esa camiseta sobre el césped. Contra cualquier rival, pero teniendo en cuenta las siete finales que le restan al Valencia Mestalla de Nico Estévez para lograr la salvación, es mucho más importante marcar la diferencia contra aquellos rivales de tu misma naturaleza.
Y sin lugar a dudas la hora de que, el auto proclamado como mejor filial de la categoría, justifique de una vez por todas su inversión e infraestructura contra otro equipo de canteranos como es el Elche Ilicitano. Porque los números no mienten: de los cuatro partidos que esta temporada han medido a los de Nico Estévez contra sus similares del Grupo III, tan sólo se ha sumado un punto y fue en casa contra el Espanyol B.
Se acabó alternar sesiones de entrenamiento con el primer y el segundo equipo del Valencia CF. Desde mañana jueves, José Luis Gayà será un miembro de pleno derecho en el vestuario de la primera plantilla con su taquilla personalizada y el mismo tratamiento que el resto de sus compañeros.
La herida del filial ya no soporta ni más tiritas ni más paños calientes. Sólo tres puntos evitarían más dolor insoportable en un Valencia Mestalla que, a una semana de afrontar un derbi contra el Levante vital para el descenso, debe responder en el Estadi Antonio Puchades al reto que le planteará el líder de la categoría.